Busca tus cuentos

Cargando...

Archivo de Cuentos, Fábulas...

CuentosDeDonCoco - 2010. Con la tecnología de Blogger.

EL LABRIEGO Y LA RIADA

EL LABRIEGO Y LA RIADA
Hace más de un siglo, en la región de Verona se registraron terribles crecidas e inundaciones a causa de enormes nevadas caídas en los Alpes, seguidas de un rápido deshielo. Los ríos, que bajaban impetuosos y rugientes de las faldas de las montañas, se salían de madre y arrollaban cuanto se oponía a su paso.
Entre otras desgracias, la riada se llevó un puente del Adigio, pero dejó en pie la parte central sobre la cual estaba edificada la casita del encargado de cobrar los derechos de peaje, quien, con su familia quedó cercado por las aguasen una especie de islita de madera que de un momento a otro podía ser arrastrada por el enfurecido río.
El atribulado funcionario, su esposa y sus hijos se asomaban a las ventanas de la casucha, agitando desesperadamente los brazos y gritando para pedir auxilio a los que los miraban desde lejos. Pero aunque muchos deseaban socorrerlos; ninguno se atrevía a cruzar la corriente.
El conde de Pulverini, noble de la región, llegó a la orilla y ofreció un premio en dinero a quien salvase a la familia; pero no había quien tuviese el valor de enfrentarse a la crecida.
En aquel momento, un labriego de otra parte del país que llegaba de viaje divisó el puente, se acercó al río y viendo el peligro que corría aquella pobre gente, saltó .a un bote y empuñando los remos bogó hacia la casa del puente, destrozado. Como la corriente era tan fuerte, aquel valiente necesitó esfuerzos y valor casi sobrehumanos para llegar después de mucho tiempo a los rotos pilares del puente que aún sostenían la casucha.
-¡Ánimo, ánimo! -dijo a la asustada familia para darle confianza; y, por fin, tras llegar al lugar, logró colocarlos en el bote.
Faltaba solo el viaje de retorno, más peligroso que el de ida, porque el bote iba recargado; pero si la fuerza y destreza del labriego eran grandes, mayores eran aún su determinación y valor; así que, por fin, pudo conducirlos a todos a la orilla.
La multitud prorrumpió en exclamaciones de alegría y aplauso, y el conde se adelantó con la recompensa prometida; pero el labriego, cuyo nombre no ha llegado hasta nosotros, aunque sí su bravura y la sublime abnegación de sus hechos heroicos, rehusó el regalo diciendo:
-No he expuesto mi vida por dinero. Puedo trabajar para mantener a, mi familia. Dad el dinero a esos pobres que lo han perdido todo.
Y así, aquel hombre esforzado no solo salvó a la familia del vigilante del puente, sino que además, con su generosidad, les proporcionó, dinero suficiente para formar un nuevo hogar.
W.M. Jackson, INC

EL LEÓN Y EL JABALÍ - FÁBULA DE ESOPO

EL LEÓN Y EL JABALÍ
Durante el verano, cuando con el calor menta la sed, acudieron a beber a una misma fuente un león y un jabalí. Discutieron sobre quién sería el primero en beber, y de la discusión pasaron a una feroz lucha a muerte. Pero, en un momento de descanso, vieron una nube de aves rapaces en espera de algún vencido para devorarlo. Entonces, recapacitando, se dijeron: ¡Mejor seamos amigos y no pasto de buitres y cuervos!
MORALEJA: Las luchas inútiles sólo sirven para enriquecer y alimentar a sus espectadores.
VALOR ALENTADO: Cuídate de los que quieren hacerte daño.
Fuente: Fábulas Ejemplares De Esopo.

FRANCISCO BOLOGNESI - RESUMEN - TRADICIONES DE RICARDO PALMA

FRANCISCO BOLOGNESI
Amanecía el sábado 5 de junio de 1880. Los rayos del sol caían sobre una casita modesta, en la falda del cerro Arica. Un soldado del batallón de Tacna era su centinela. Su humilde moblaje era una tosca mesa de pino, unos sillones desvencijados, una banca y una cama de campaña.
Sentado junto a la mesa y señalando un plano, estaba un anciano de marcial gesto.
Vestía pantalón grana, paletó azul y quepí con la insignia de jefe de mando superior.
Era el coronel Francisco Bolognesi.
- Mi coronel, -le dijo un oficial- está el emisario enemigo.
- Que pase -contestó Bolognesi y se puso de pie.
Era el sargento mayor Cruz Salvo, que anunciaba:
Señor coronel, una división de seis mil de nuestros hombres está a tiro de cañón de la plaza.
- lo sé -dijo con voz serena Bolognesi-, aquí somos mil seiscientos, decididos a salvar el honor patrio. - Pero el honor no impone sacrificios: nuestra ventaja numérica es de cuatro a uno y ello justifica una capitulación, la que se hará honrando al vencido y al vencedor.
- Estoy resuelto “a quemar el último cartucho”.
Más tarde convocaba a una junta de guerra a sus jefes. Allí presentó, sin exagerar, el sombrío cuadro. Y les indicó su decisión de “quemar el último cartucho”.
La palabra resuelta de Bolognesi halló resonancia en los viriles corazones de Joaquín Inclán, Justo Arias, Guillermo More, Mariano Bustamante y Ramón Zavala:
- ¡Combatiremos hasta morir! -fue su emotiva respuesta.
Grito repetido por los más jóvenes, como: los hermanos Cornejo, Ricardo
O' Donovan, Armando Blondel y Alfonso Ugarte; mancebo que, perdida toda esperanza, clavó el acicate del corcel que montaba, cayendo en la inmensidad del mar.
Y todos, en la sangrienta como gloriosa hecatombe de Arica, - al igual que Bolognesi - cayeron mirando el pabellón de la patria y balbuceando el nombre querido del Perú.
Fuente: Tradiciones De Ricardo Palma.

EL LEÓN Y LA LIEBRE - FÁBULA DE ESOPO

EL LEÓN Y LA LIEBRE
Sorprendió un león a una liebre que dormía tranquilamente. Pero cuando estaba a punto de devorarla, vio pasar a un ciervo. Dejó entonces a la liebre por perseguí al ciervo. Despertó la liebre ante los ruidos de la persecución, y no esperando más emprendió huida.
Mientras tanto el león, que no pudo alcanza al ciervo, ya cansado, regresó por la liebre y se halló con que también había fugado. Entonces el león se dijo
- Bien lo merezco, pues teniendo ya una presa la dejé para ir tras la esperanza de obtener una mayor.
MORALEJA: Protege el pequeño beneficio y mantenlo, hasta tanto no tengas realmente en tus manos uno mayor.
VALOR ALENTADO: Ser realista, que no es conformista.
Fuente: Fábulas Ejemplares De Esopo.

LA VIRGEN DEL SOMBRERITO Y DEL CHAPÍN DEL NIÑO - RESUMEN - TRADICIONES DE RICARDO PALMA

LA VIRGEN DEL SOMBRERITO Y DEL CHAPÍN DEL NIÑO
Los dominicos enseñan una estampa de la Virgen llevando, en vez de corona, un sombrerito de piel. Veamos:
En inminente quiebra hallábase un buen comerciante si no llegaba al Callao un navío con mercancías valiosas que le enviaban desde Cádiz.
El barco no llegó y llegaron sus acreedores, cobrándole una suma morrocotuda. Entonces visitó a la Virgen, pidiéndole en préstamo su corona de oro, prometiendo que para su fiesta la devolvería mejorada. Aceptó la Virgen, dejándole en prenda su sombrero.
Lo milagroso es que la Virgen la pasó ensombrerada, sin que nadie lo notara. Llegó la víspera de la fiesta y el español no aparecía. La Virgen no aguantó trampas, y para notificarlo se mostró sin corona y con sombrero. Se armó el tole-tole.
El día de la fiesta presentose por fin, con una corona superior en costo y finura, labrada en Europa por un platero genovés. El sombrero se le devolvió como reliquia.
Una mujer iba a la chirona por orden del alcalde del crimen. La Inquisición podía llevarla a la hoguera: la acusaban de robo sacrílego, al hallársele un chapincito de oro y piedras preciosas del Niño de la Virgen del Rosario.
Aducía que, estando ante la Virgen clamando ayuda, -pues era viuda, con hijos y estando medio tísica- compadecido el Niño extendió el piececito y dejó caer su chapín.
- El juez la llamó “embustera”; y ella exigió que declarasen la Virgen y el Niño.
La justicia acató legítima exigencia; y al otro día, en Santo Domingo, la esperaban el juez, el escribano y tres curas. Empezó el juez por interrogar a la Virgen, quien se portó como si la cosa no fuera con ella.
- ¡lo ves, mentirosa! -dijo el juez a la encausada.
- Pregunte al Niño. Quizás lo hizo sin permiso de ella.
El juez, sin disimular la risa, hizo la pregunta, cuando el bellísimo Niño movió el pie y dejó caer el otro chapincito. Ante maravilloso milagro quedó la mujer libre; y los curas, engreídos, le dieron una pensión de seis reales diarios.
Fuente: Tradiciones De Ricardo Palma.

EL LEÓN ENAMORADO DE LA HIJA DEL LABRADOR - FÁBULA DE ESOPO

EL LEÓN ENAMORADO DE LA HIJA DEL LABRADOR
Se había enamorado un león de la hija de un labrador y la pidió en matrimonio. Y no podía el labrador decidirse a dar su hija a tan feroz animal, ni negársela por el temor que le inspiraba. Entonces ideó lo siguiente: le dijo que le parecía digno como yerno, pero que al menos debería cumplir con esta condición: que se arrancara los dientes y se cortara sus uñas, porque eso atemorizaba a su hija.
EI león aceptó los sacrificios porque en verdad la amaba. Una vez que el león cumplió lo solicitado, cuando volvió a presentarse ya sin sus poderes, el labrador lleno de desprecio por él, lo despidió sin piedad a golpes.
MORALEJA: No te fíes tanto como para despojarte de tus defensas, pues serás vencido por lo que antes te temían
VALOR ALENTADO: No haceros falsas ilusiones.
Fuente: Fábulas Ejemplares De Esopo.

UN MONTONERO - RESUMEN - TRADICIONES DE RICARDO PALMA

UN MONTONERO
La batalla de Huamachuco, último y heroico esfuerzo de patriotismo peruano, se libró ello de julio de 1883. Poco más de dos mil peruanos, a órdenes de Cáceres -con pocas armas y municiones, y sin bayonetas- emprendieron ataque contra la división del chileno Gorostiaga.
Fuerza que sufrió situación aflictiva, con una derrota que se habría consumado si les hubiéramos opuesto bayonetas La hecatombe fue horrible, con repase de heridos y mil doscientos muertos ante ciento sesenta de ellos.
Chile pudiera considerar esta batalla como una de sus mejores victorias, si el mismo Gorostiaga no la hubiera rebajado al fusilar a Emilio Luna, Florencio Portugal y otros jefes; calificándolos como “montoneros” y no como soldados. Necesitaba disculpar su ferocidad, su sed de sangre, vengándose por haberse visto casi en derrota.
El 14 de julio, un soldado chileno oyó ligeros quejidos exhalados por un joven que yacía en la tierra.
- Acércate, -le dijo el caído- soy el coronelleoncio Prado: pon el cañón de tu rifle sobre mi frente, y dispara.
Sorprendido ante esa energía de espíritu, en una camilla condujo al herido hasta el cuartel de Huamachuco.
Prado tenía una pierna hecha astillas por un balazo. Cuando vio que ya se presentaban para fusilarlo pidió una taza de café y, volviéndose al oficial, le dijo:
- Pido gracia, y es que me permita mandar el fuego.
- No hay inconveniente -dijo el oficial chileno.
- ¡Calma! He hecho lo que he podido por mi patria y moriré contento -dijo al saber que no había capellán.
Pidió cuatro tiradores y les ordenó:
- Dos tirarán al corazón y dos a la cabeza: al concluir el café apuntarán, y al golpear con la cuchara se hará fuego.
Veía tranquilo agotarse el líquido, sabiendo que en el último sorbo iba la amargura.
Bebió, tocó con energía la cuchara y cuatro balas lo hicieron dormir el sueño eterno.
Fuente: Tradiciones De Ricardo Palma.

EL LEÓN Y EL MOSQUITO - FÁBULA DE ESOPO

EL LEÓN Y EL MOSQUITO
Un mosquito se acerco a un león y le dijo:
- No te temo y no eres más fuerte que yo. Si crees lo contrario, demuéstramelo.
¿Qué arañas con tus garras y muerdes con tus dientes? ¡Eso, también lo hace una mujer con un ladrón!
Yo soy más fuerte que tú, y si quieres, ahora mismo te desafío a un combate.
Y zumbando, cayó el mosquito sobre el león, picándole repetidamente cerca a la nariz, donde no tanta pelo.
El león empezó a arañarse con sus propias garras, renunciando al combate.
El mosquito victorioso hizo sonar de nuevo su zumbido; y sin darse cuenta, de tanta alegría, fue a enredarse en una tela de araña. Al tiempo que era devorado por la araña, se lamentaba que él, que luchaba contra los más poderosos venciéndolos, fuese a perecer a manos de un insignificante animal, la araña.
MORALEJA: No cantes victoria antes de tiempo
VALOR ALENTADO: Respeta al grande como al pequeño.
Fuente: Fábulas Ejemplares De Esopo.

CON DÍAS Y OLLA VENCEREMOS - RESUMEN - TRADICIONES DE RICARDO PALMA

CON DÍAS Y OLLA VENCEREMOS
Junio de 1821, se habían iniciado las negociaciones de Punchauca entre el virrey la Serna y San Martín; recibiendo los patriotas, acantonados en Huaura, el siguiente santo y seña: “Con días -y ollas- venceremos”. Para todos -excepto Monteagudo, luzuriaga, Guido y García- era algo disparatado, y los más benévolos se alzaban de hombros murmurando: “¡Extravagancias del general!”.
Pero, se basaba en un hecho histórico que hoy relato, apoyándome en el escritor argentino Mariano Pelliza:
San Martín no quería que la ocupación de lima se deba a una batalla, sino al ingenio político. Sus tropas, ansiosas, rabiaban con su aparente pachorra; pero él no quería exponer a sus soldados. En comunicación secreta con los patriotas de lima, confiaba en su habilidad para conspirar.
Pero -con frecuencia - los espías interceptaban esas comunicaciones, frustrando los planes. Esta dificultad lo inquietaba. Paseaba una tarde junto a Guido y un ayudante, por la única calle de Huaura, cuando cerca del puente fijó su mirada en un caserón Que en el patio tenía un horno para la alfarería.
Era este, lucrativo oficio; pues vajillas y utensilios eran de barro cocido y calcinado.
De pronto, San Martín tuvo una de esas inspiraciones Que acuden sólo al cerebro de los genios: el alfarero era un indio despierto, amigo de los rebeldes.
Habló con él y lo comprometió a fabricar una olla con doble fondo, tan bien hecha Que el ojo más hábil no pudiera descubrirla.
El indio hacía cada semana un viaje a Lima llevando dos mulas cargadas de ollas entre las Que, sin diferenciarlas del resto, iba la “olla revolucionaria” llevando en su doble fondo valiosas cartas en cifras.
El indio se dejaba registrar; respondía con naturalidad, se quitaba el sombrero cuando le mencionaban a Fernando VII, y lo dejaban ir, no sin antes hacerle gritar: “¡Viva el rey! ¡Muera la patria!”, ¿Quién diablos iba a pensar que el indio andaba metido en belenes políticos?
Vivía Francisco Javier de Luna Pizarro, sacerdote de gran influencia, en una casa frente a la Iglesia de la Concepción. Fue designado por San Martín para tratar con el ollero; Quien pasaba a las ocho de la mañana, gritando: “¡Ollas y platos!... ¡Baratos!”, con lemas que podían llenar un libro de pregones. Quien quería saber la hora le bastaba oír al pregonero. Hoy, Lima se ha despoetizado. Juzgue el lector, cómo se distribuían las horas:
La “lechera” indicaba las seis de la mañana.
La “tisanera” y la “chichera” de Terranova, las siete.
El “bizcochero” y la vendedora de “leche vinagre” que gritaba ¡alacuajadita!, las ocho, ni más ni menos.
La vendedora de “sanguito de ñajú” y “choncholíes” marcaba las nueve, hora de canónigos.
La “tamalera” era anuncio de las diez.
A las once pasaban la “melonera” y la mulata de convento con su “ranfañote”, “coca da”, “bocado de rey”, “chancaquitas de cancha y de maní”, y “frijoles colados”.
A las doce aparecían el “frutero” de canasta llena y el proveedor de empanaditas de picadillos.
La una era indefectiblemente señalada por el vendedor de “ante con ante”, la “arrocera” y el “alfajorero”.
A las dos de la tarde la “picaronera”, el “humitero” y el de la “rica causa” de Trujillo atronaban con sus pregones.
A las tres el “melcochero”, la “turronera” y el “anticuchero” o vendedor de “bistec en palito” clamoreaban con más puntualidad que Mari-Angola de la Catedral.
A las cuatro, la “picantera” y el de la “piñita de nuez”.
A las cinco, el “jazminero”, el de “caramanducas” y el de flores de trapo, decían: “¡Jardín! ¿Muchacha, no hueles?”.
A las seis canturreaba el “raicero” y el “galletero”.
A las siete de la noche pregonaban el “caramelero”, la “mazamorrera” y la “champucera”.
A las ocho, el “heladero” y el “barquillero”.
Aún a las nueve de la noche, junto con el “cubrefuego”, el “animero” o sacristán salía con capa colorada y farolito en mano pidiendo para las ánimas del purgatorio. Este, era el terror de los niños rebeldes para acostarse.
Después, el sereno cantaba, entre piteo y piteo: “¡Ave María Purísima! ¡Las diez han dado! ¡Viva el Perú, y sereno!”. Que eso sí, así estuviese nublado, la consigna era declararlo ¡sereno! De hora en hora se repetía hasta el alba. Y no mencionamos a otros pregones que se daban a hora fija.
¡Ah... tiempos dichosos! Para saber con fijeza la hora, ningún reloj más puntual Que el pregonero.
Volvamos a nuestro ollero, quien al terminar su pregón recibía a los vecinos con necesidad de utilería.
Pedro Manzanares, mayordomo de Luna Pizarro, era un negrito con la lisura de “budingas” y mataperros limeños, gran decidor de desvergüenzas, “cantador” y navajero, pero leal a su amo y mimado por este. Jamás dejaba de acudir al pregón y pagar un real por una olla de barro; pero al otro día volvía a salir, olla en mano, gritando:
_ Oiga, “so cholo” ladronazo, con sus ollas que se chirrean todito... Ya puede cambiarme la que le compré ayer, antes de Que se la rompa en la tutuma.
¡Pedazo de pillo!
El indio reía, desoyendo injurias y cambiaba la olla.
Y tanto se repitieron compra, cambio y palabrotas, - soportados con paciencia por el indio- que el barbero de la esquina, andaluz metiche, llegó a decir una mañana:
- ¡Córcholis! ¡Vaya cleriguito! Ni yo, que soy pobre, hago tanta alharaca por un real. Oye, macuito: las ollas y las mujeres, que también son de barro, se toman sin devolución; y el que se lleva chasco, se mama el meñique y ni chista y ni mista, se aguanta sin molestar al vecindario.
- Y a usted, so godo de cuernos: ¿quién le dio vela en este entierro? -contestó Perico -. Vaya usted a desollar barbas y cascar liendres, y no se meta, adefesio en misa de una, so chapetón embreado y de ciento en carga...
Se le avinagró al andaluz la mostaza, y dijo ceceando: “¡María Santísima! Hoy me pierdo, ¡aguárdate, gallinazo de muladar!”. Y echando mano a su puñal corrió sobre Perico que, sin esperar, se refugió en la casa de su amo.
¡Qué tal si la pelea habría servido para sospechar de las ollas!
Pero, felizmente, ella coincidió con el último viaje ollero; pues sucedió el 5 de julio, y al otro día dejaba La Serna: Lima, siendo tomada por los patriotas el 9
Cuando el indio, a inicios de junio, llevó a San Martín la primera olla devuelta por Perico; el general, después de leer las cartas que venían en su doble fondo, se volvió a García y Monteagudo Y les dijo risueño:
- Como lo pide el suplicante.
Luego, se aproximó al amanuense Y añadió:
_ Escribe, Monolito, santo, seña y contraseña para hoy: “Con días -y ollas- Venceremos”.
La victoria codiciada por San Martín era tomar Lima, sin quemar pólvora; y merced a las ollas que llevaban en el vientre ideas más formidables que los cañones, el éxito fue tal, que el 28 de julio se juraba en Lima la Independencia. Junín y Ayacucho fueron el corolario.
Fuente: Tradiciones De Ricardo Palma.

EL LEÓN Y EL BOYERO - FÁBULA DE ESOPO

EL LEÓN Y EL BOYERO
Un boyero que apacentaba un hato de bueyes perdió un ternero. Lo buscó, recorriendo los alrededores sin encontrarlo
Entonces prometió a le sacrificarle un cabrito descubría quién se lo había robado.
Entró al bosque y vio a un león comiéndose al ternero. Levantó aterrado las manos al cielo gritando:
- ¡Ohh gran Zeus antes te prometí inmolarte un cabrito si descubría al ladrón; pero ahora te prometo sacrificar un toro si consigo no caer en las garras del ladrón!
MORALEJA: Al buscar una solución, medítalo, porque con tu elección puedes convertirlo en otro problema.
VALOR ALENTADO: La mesura a la hora de elegir.
Fuente: Fábulas Ejemplares De Esopo.

LA DEL “SU ÚNICO HIJO” - RESUMEN - TRADICIONES DE RICARDO PALMA

LA DEL “SU ÚNICO HIJO”
De clavo tal puñalada que no llegas al “sunicuijo”; era una frase a la que no encontrábamos, no diremos entripados, pero sí sentido común.
Pensábamos en uno de esos tantos gazapos o despapuchos del habla popular.
También, para significar Que alguno había muerto con ignominiosa muerte, oímos decir: le llegó la del “sunicuijo”, y quedábamos a tan oscuras como un ciego.
Pero hasta que ayer doña Mariquita, costurera contemporánea de Rodil, -dizque le pegaba los botones de los calzoncillos- dio explicación clara y correcta de la frase, que en verdad no puede ser más expresiva:
Allá en los patriarcales años del rey amo y señor, cuando un prójimo era -por ladrón o asesino- sentenciado a la pena de horca, tan luego como el verdugo le ceñía en el pescuezo la escurridiza lazada y estaba en aptitud de cabalgar sobre los hombros del criminal daba tres palmadas, que eran la señal de no quedarle preparativo por hacer y de estar listo para el cabal desempeño de sus funciones. Entonces, el fraile auxiliador del reo que se situaba frente al callejón de Petateros, a pocas varas del cadalso, mostraba un crucifijo, y con tono pausado decía en voz alta:
- Creo en Dios, Padre, todopoderoso, creador del cielo y de la tierra; y en Jesucristo, su único Hijo... y no decía más, porque al llegar al “su único Hijo”, el jinete de gaznates daba la pescozada y, verdugo y víctima se balanceaban en el aire.
Fuente: Tradiciones De Ricardo Palma.

LA RANA DEL PANTANO Y LA RANA DEL CAMINO - FÁBULA DE ESOPO

LA RANA DEL PANTANO Y LA RANA DEL CAMINO
Vivía una rana felizmente en un pantano profundo, alejado del camino, mientras su vecina vivía muy orgullosa en una charca al centro del camino. La del pantano le insistía a su amiga que se fuera a vivir aliado de ella, alejada del camino; que allí estaría mejor y más segura.
Pero no se dejó convencer, diciendo que le era muy difícil abandonar una morada donde ya estaba establecida y satisfecha. Y sucedió que un día pasó por el camino, sobre la charca, un carretón, y aplastó a la pobre rana que no quiso aceptar el mudarse.
MORALEJA: Pon atención a los amigos de corazón.
VALOR ALENTADO: El saber acatar los buenos consejos.
Fuente: Fábulas Ejemplares De Esopo.

¿QUÉ PASÓ UN DÍA COMO HOY - 08 DE NOVIEMBRE? Efemérides

¿QUÉ PASÓ UN DÍA COMO HOY - 08 DE NOVIEMBRE?


Faltan 53 días para finalizar el año

08 De Noviembre:

• Día Mundial del Urbanismo, declarado por las Naciones Unidas
1895: Alemán Contad Rontgen expone sus rayos X
1932: Franklin Roovevelt es presidente de los EE.UU.
1939: Sufre un atentado Hitler por Georg Elser en Múnich, pero sobrevive.
1956: Israel toma la decisión de retirar sus tropas del Sinaí.
1960: John F. Kennedy es elegido presidente como presidentes de los EE.UU.
1999: Fallece en Lima, César Miró Quesada Bahamonde, escritor y compositor, autor del vals "Todos Vuelven", que se convirtiéndose un himno para los peruanos inmigrantes.
 

Seguidores

Lugares de donde nos visitan


Directorios

planetaperu.pe
estamos en
PlanetaPeru
La Libertad

Directorio de Blogs Academics Blogs
Academics Blogs Peru Blogs Free Automatic Link Cárdenas.net Web Link Exchange Text Backlink Exchanges Soqoo Link Exchange Directorio Web - Directorio de Páginas Webs Intercambio de enlaces Free Backlinks top backlinks referers free Intercambio gratis de Enlaces Blogalaxia



Cuentos de Don Coco Copyright © 2009 Community is Designed by Bie