PIEL DE OSO
- Si eres valiente, dispara contra el oso que está a tu espalda. El joven disparó el arma y la piel del oso cayó al suelo. Este desapareció entre los árboles.
- Si llevas esa durante tres años seguidos le dijo el mago – te daré una bolsa de monedas de oro que nunca quedará vacía. ¿Qué decides?
- El joven se mostró de acuerdo. Disfrazado de oso y con dinero abundante, empezó a recorrer el mundo. De todas partes le echaban a pedradas. Sólo Ilse, la hermosa hija de un posadero, se apiadó de él y le dio de comer.
- Veo que has cumplido tu promesa – dijo éste –. Yo también cumpliré la mía. Quédate con la bolsa de oro, que nunca se vaciará y sé feliz.
- En todo aquel tiempo, Ilse lloraba desconsolada.
- Eres tonta – le decía la gente –; siendo tan hermosa, encontrarás otro novio mejor.
- Entonces apareció un apuesto soldado y pidió al posadero la mano de su hija. Como la muchacha se negara a aceptarle, el dijo sonriente:
- ¿No te dice el corazón que “piel de oso” soy yo?
Se casaron y no sólo ellos fueron felices sino que, con su generosidad, hicieron también dichosos a los pobres.
Mensaje: La generosidad es dar a los demás más allá de lo que nos corresponde por justicia u obligación.
Implica la capacidad de salir de nosotros mismo y, por un acto de amor, enfocar las necesidades de los otros.
Joaquín García L.
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